El rotundo dicho «Catalunya es
un sol poble» se va desvaneciendo. Ya no se sigue con tanto énfasis como
antaño. Es más, ahora no tengo claro si dicha formulación tuvo más carácter
político que ideológico. Sea como fuere el paso del tiempo y sus circunstancias
han ido erosionando la unicidad –real o imaginada-- del pueblo de Catalunya.
Más todavía, de un tiempo a esta parte aparecen --¿o reaparecen?-- toda una serie de consideraciones de estricto
carácter político que afirman ya que «hay dos Cataluñas». Aquí encontramos una
primera coincidencia entre el separatismo político y sus contrarios de la
derecha de Ciudadanos y el Partido Popular. La idea está haciendo fortuna en
ambos lados de la barricada.
¿Dos Cataluñas? Posiblemente es
una consecuencia de la tradición binaria de Occidente, que perezosamente se
encoge de hombros ante la complejidad de las sociedades. Dos Cataluñas. Que ya
no se patrimonializan desde la política sino que atraviesa ciertos movimientos
subalternos de aquella.
Sin embargo, tengo para mí que
hay mucho que hablar sobre el particular. Porque está claro que hay amplios
sectores ciudadanos que no se sienten representados ni por los hunos ni por los
hotros. Ciertos sectores que han sido bautizados despectivamente en el rio
Jordán como «equidistantes». Se trata de una concepción que va más allá del
carácter geométrico y quiere alcanzar
la naturaleza política de la traición. O de la inanidad: ciudadanos de
chichinabo estos equidistantes.
¿Quiénes somos los
equidistantes? Los que vivimos y trabajamos en Cataluña que aborrecemos intelectual
y políticamente las dos versiones del nacionalismo: el del soberanismo y el del
neo lerrouxismo. Equidistantes, sí. Pero no pasivamente sino con un compromiso
militante contra los hunos y los hotros.
También de esto hablaré en
Mataró en el acogedor Café de Mar. Mañana antes de que el Sol se ponga por
Llavaneras. Sí, en el Mataró de Joan Peiró, Antoni Martí Bernasach y Teresa
Cortina. Teresa Cortina, madre noble de la izquierda y de Comisiones
Obreras. Yo soy de Teresa Cortina.
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