E la nave va.
Contra viento y marea, la nave –o sea, el gobierno progresista-- mantiene su
singladura. A pesar del parte meteorológico,
el Arca de Noé –es decir, el gobierno de coalición-- sigue su rumbo. Acertaron
quienes pronosticaron que la anómala moción de censura fortalecería a Pedro Sánchez y al resto de la dotación del barco.
La
nave ha sorteado el primer escollo: el gobierno presenta los Presupuestos
generales del Estado, fruto del acuerdo entre el PSOE
y Unidas Podemos. Hasta donde sabemos, se ha
llegado al acuerdo sin que se oyera una voz más alta que otra. Vale decir, sin
que nadie exhibiera gratuitamente más músculo que el otro. No ha habido lucha
por la limpieza de sangre socialdemócrata, sino sentido de la responsabilidad. Pedro
y Pablo se han arremangado los brazos. Quienes desde las diversas antípodas del
universo auguraban un nuevo encontronazo en el gobierno por ver quién era más
responsable o más ´radical´ en lo relativo a las cuentas públicas, se han
llevado un buen y amargo chasco. El tertulianaje sigue siendo chusquero.
Demasiados
errores de bulto están acumulando los covachuelistas de Pablo Casado. Un inciso: a Casado le
están saliendo ciertas grietas. Los lenguajes de algunos presidentes autonómicos
–Murcia, Andalucía y Castilla León-- están
divergiendo sensiblemente del grupo dirigente de la calle Génova.
La
nave va. Ahora rumbo a presentar las cuentas públicas en el Parlamento.
Con
este gobierno y en esta situación se ha llegado a un acuerdo en el Pacto de Toledo. Éxito del gobierno progresista, y –no
es irrelevante— una prueba de la eficacia del Departamento que dirige Yolanda Díaz una ministra comunista, hija de
comunistas, de ese dirigente sindical, macizo de CC.OO, Suso. Un acuerdo de la mayor importancia tanto por el asunto en
cuestión como por el momento en que se aprueba. Una primera valoración de urgencia
sobre ese particular la tenemos en https://pilarcefe.wordpress.com/,
la nueva residencia del blog de Quim González Muntadas.
Así,
pues, los hechos indican que «la nave va». Es más, como dice Manuel Gómez Acosta en un controvertido artículo en ´Crónica global´ «la presencia de la izquierda radical
en el Gobierno puede ser un factor de estabilización en lo social» (1). Ahora –ahora
mismito-- podemos hacer una leve
corrección a esas palabras: la presencia de la ´izquierda radical´ es ya un factor de estabilización. La corrección
del tiempo verbal es de la mayor importancia. Porque ´factor de
estabilización´ es lograr un acuerdo del
que también se ha hecho corresponsable el Partido Popular. La nave va, porque hay
capacidad de dirección así en el puente de mando como en la sala de máquinas.
Cierto, se mantienen los problemas viejos y nuevos; sigue el parte meteorológico
indicando nubarrones. Pero las novedades están ahí. De manera que vamos a dejarnos de puñetas
planteando lo que primero hay que
hacer y plantear lo que se debe hacer antes.
Vale.
Post
scriptum.--- Don Venancio Sacristán insiste: «Lo
primero es antes». Así lo recogió el maestro Enric
Juliana en la clausura de la presentación de su libro “Aquí no hemos
venido a estudiar” en CC.OO. junto a Unai Sordo.
Compruébelo en https://twitter.com/ccoo/status/1312349255408345089?s=21
No hay comentarios:
Publicar un comentario