Los
partidos políticos que intentan repartirse la túnica sagrada en las elecciones
andaluzas están haciendo el caldo gordo a Vox, de momento extraparlamentario. Error
caballuno. No hay debate, acto u otros momentos electorales donde los cuatro en
liza no mienten la bicha. Unos alertando al miedo, otros en una
operación blanqueo. Total, entre unas cosas y otras, este Vox aparece como si
de él dependiera algo. Lo único que han conseguido por ahora es sacarlo de las
alcantarillas y darle la categoría de sujeto competidor. En definitiva, parte
de la campaña de Vox se la han hecho los demás. Gratis, además. Y, más en
concreto, una estupidez.
Dicho
lo cual, por si voy errado, busco el libro de Carlo
Maria Cipolla (1922 – 2000) La
teoría de la estupidez y veo que sigue viendo pasar el tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario