Lo cantó Peret en la clausura de los Juegos Olímpicos del 92. Y sedujo a los
cinco continentes. «Barcelona tiene poder». Muchas veces a lo largo de la
historia lo ha demostrado. Ahora también y sobre todo. El terrorismo lo puso a
prueba y ha visto el resultado. Otra vez: Barcelona tiene poder.
Las masivas concentraciones en
las Ramblas, esa avenida que, según García Lorca, debería dar la vuelta al
mundo. Las nutridas manifestaciones de musulmanes rechazando el terrorismo,
toda una novedad de gran envergadura. Los cortejos de los Mossos d´Esquadra y
de los taxistas. La ausencia de islamofobia. El gesto de los vecinos del puebo
de Hostarich borrando las pintadas
contra el Islam. El masivo acto inter religioso celebrado en Barcelona. O sea,
Barcelona tiene poder. Y el sábado la muchedumbre, activa e inteligente, volverá
a ocupar las calles de la ciudad.
Quede claro: Isis se equivoca si
cree que van a arrugarnos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario