Cuando los
sindicalistas del mundo entero se reúnen en un congreso, el acontecimiento
tiene todos los visos de ser formalmente importante. Más todavía en el nuevo
eje de coordenadas de la globalización. Es lo que está sucediendo estos días en
Berlín: el Congreso de la Central Sindical
Internacional, el nuevo sujeto global que nació en Noviembre de 2006 tras la
fusión de la CIOLS
y la CMT.
Muchos son
los desafíos que tiene que abordar esta magna reunión. De ahí que parece de
cajón que, tras el evento, la delegación española que ha participado informe
pormenorizadamente de lo que se ha acordado en Berlín y del itinerario de
propuestas para el futuro. Es decir, que haga justo al revés lo que ha sucedido
durante el proceso precongresual en nuestro país.
Disculpen
las ganas de saber. ¿Qué
participación han tenido las estructuras de nuestro sindicalismo confederal
español en relación a tan relevante congreso? ¿qué mandato --y de dónde
provino-- llevaban las delegaciones españolas? ¿qué relación existe entre lo
discutido previamente y lo aprobado en Berlín? Como se verá, no se trata tanto
de un genérico deseo de saber como de constatar qué tipo de deliberación se ha
producido entre nosotros y lo acordado por el Gotha sindical.
Apostilla.
Como es sabido, en los medios de comunicación españoles dicho congreso no ha
aparecido. Sin embargo, ¿por qué expresar sorpresa ante ello si entre nosotros
ha pasado totalmente desapercibido?
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