Nota editorial.
Quim González, como verá el lector, hace una propuesta a este blog. La acogemos
con entusiasmo y así lo haremos. El resultado positivo de ello estará en función
de las colaboraciones que recibamos. Por nosotros no quedará. Y, sin más preámbulo inauguramos el "espacio" Sindicato en el centro de trabajo.
Frutos del árbol
sindical
Joaquím González
Muntadas
Hace justo un
año escribí y se publicó en este blog un artículo titulado "Que el árbol no impida ver el bosque" referido a la acción sindical y sus prioridades. Un año
después, no estoy seguro de que hayan cambiado mucho las cosas, más allá del
incremento del paro, más cierres de empresas, más falta de crédito,
estrangulamiento y empeoramiento del I+D, asfixia de los centros e
instituciones encargadas de desarrollarlo y desesperación de nuestros
investigadores. Podríamos llenar páginas con los déficits que reclaman la
atención del Sindicalismo Confederal, sin olvidar, por supuesto, los recortes
en sanidad, enseñanza, incluso de algunos derechos civiles, lo que unido al
deterioro del clima político y social, añade mayor carga a las ya débiles alas
para el despegue económico necesario para la salir de la crisis.
Junto a todo
ello, los centros de trabajo seguirán demandando de la acción sindical una
atención del día a día. Atención a la organización del trabajo, a la
profesionalidad, a la salud, a la igualdad. Seguirán demandando
respuestas, unas respuestas que parece que no se oyen, pero que seguro que en silencio
se están dando ya día a día. En silencio, porque en pocas jornadas, seminarios,
o cursos de verano, son materia central de estudio, de reflexión y formación. Y
es algo que llama la atención, en comparación con otros países, como particular
es el hecho de los escasos trabajos científicos, así como en comparación con
otros países, la reducida edición de materiales de estudio e investigación
sobre temas relacionados con la organización del trabajo, la salud laboral, la RSC y las políticas de
igualdad, o las salariales, generadas por la acción sindical y la negociación
colectiva.
Hay muy pocos
ámbitos y foros que expresen como el blog “Metiendo Bulla” el interés por la
contractualidad y la organización del trabajo. Los artículos de Miquel Falguera
o los dedicados a Bruno Trentin y la
Ciudad del Trabajo, son buenos ejemplos de ello. Por esto,
sugiero al amigo José Luis López Bulla que considere la posibilidad de impulsar
un espacio que recoja experiencias, acuerdos, pactos y convenios que
expresen que la realidad de la acción sindical es mucho más rica de lo que
refleja la formalidad de los órganos de dirección de las organizaciones
sindicales, las cátedras de derecho o las escuelas de negocios, y más rica que
lo relatan algunos medios de comunicación. Un espacio que pueda ser un
escaparate donde exponer experiencias que hoy quedan en la sombras del
desconocimiento general, y que permita a los interesados conocerlas y
profundizar en ellas. Porque hay cientos de ejemplos que merecen ser conocidos.
Y para predicar
con el ejemplo de dar a conocer experiencias y acuerdos que permitan resaltar
el valor de la acción sindical y la negociación colectiva en muchas empresas,
que nos certifican que, más allá de las leyes regresivas y los serios esfuerzos
por debilitar el valor de la representación colectiva y de la acción sindical
en el espeso bosque del mundo del trabajo, hay árboles que dan muy buenos
frutos.
Paso a explicar
junto con José Ignacio Léniz uno de estos frutos que la acción sindical ha
construido, con especial protagonismo en este caso de CCOO, y en particular de
su Sección Sindical en la empresa Michelin España.
MICHELIN:
TRABAJAR MENOS PARA TRABAJAR TODOS
José Ignacio
Léniz Azkárate (Secretario General S. Sindical de CCOO Michelin)
Joaquim González
Muntadas (Ex Secretario general de FITEQA-CC OO)
Michelin es una
empresa dedicada principalmente a la fabricación y distribución de neumáticos.
Su matriz se encuentra en Clermont Ferrand (Francia) y cuenta con un plantilla
a nivel mundial en torno a 110.000 trabajadores. En España tiene 4
plantas de fabricación situadas en Aranda de Duero (Burgos), Lasarte-Oria
(Gipuzkoa), Valladolid y Vitoria-Gasteiz; una división comercial con su sede
principal en Tres Cantos (Madrid) y tres grandes almacenes en Burgos, Subirats
(Barcelona) y Seseña (Toledo), además de un centro de experimentación en
Níjar-Cabo de Gata (Almería). En total alrededor de 8.000 trabajadores, con
alta de afiliación a algún sindicato.
Es un empresa
con una larga historia de luchas sindicales y acuerdos, algunos de especial
relevancia, lo que ha permitido construir unas relaciones laborales maduras que
han representado una fortaleza en la extrema competencia interna de la
multinacional, como lo demuestra que, tras la globalización de los mercados, la
descolonización productiva, la profunda renovación tecnológica y las sucesivas
crisis, España mantenga altos niveles de empleo con unos costes salariales
similares o incluso mayores en algunos grupos profesionales que Alemania o
Italia, pero con menor coste unitario, y por tanto con unos trabajadores más
competitivos.
Michelin España
es una empresa que pasó de, en el inicio de los años 80, no reconocer
prácticamente el derecho a la negociación colectiva, a ser una de las más
innovadoras en la gestión de las relaciones industriales y laborales.
Fue la primera
que incorporó el contrato relevo como herramienta de rejuvenecimiento de su
plantilla, resolviendo en el Ministerio de Trabajo muchos problemas de
reglamento de una ley pensada para su uso individual y no colectivo, y que se
extendió rápidamente a otras muchas empresas.
Innovador fue
también el “Contrato fijo con jornada variable” pactado hace 15 años cuando en las empresas de la
automoción y sus auxiliares, se conocían porcentajes del 30 % y 40% de
eventualidad para hacer frente a las fluctuaciones del mercado. Se trataba de
un contrato fijo con base del 100% de la jornada, que en el caso de una bajada
productiva importante, previa justificación a la representación social, la
empresa se reserva una flexibilidad del 30% de la jornada. Una innovación
contractual que ha supuesto un éxito total hasta la actualidad, favoreciendo la
realización de más de cuatro mil contrataciones indefinidas en los 15 años que
lleva aplicándose.
Innovador fue
asimismo el “Plan de Reindustrialización y Recolocación” contemplado en el Plan
Social del Acuerdo Sindical de cierre de la planta de fabricación de llantas en
Aranda de Duero (Burgos). Respondiendo a criterios de Responsabilidad Social se
comprometieron importantes esfuerzos en personas, técnicos y económicos,
que permitieron atraer a nuevas empresas a la misma ubicación que tenía la
empresa cerrada, generando tanto o más empleo que el perdido. Con ello se dotó
de sentido lo que a menudo se califica de Plan Social de Compromisos de
Recolocación, que, como permite la Reforma Laboral , no pasa de ser un trámite
administrativo más, en el que la empresa no espera gastar más que la ayuda en
la confección del curriculum de la persona despedida.
A mediados del
2012, se agotaron los mecanismos internos de flexibilidad y Michelin planteó un
ERE temporal, asumido por la representación sindical con el objetivo de
"ganar" algo de tiempo, pero con la voluntad de intentar evitar que
la gestión de la flexibilidad de jornada fuera siempre el recurso del ERE
temporal. Tiempo que sirvió para proponer y promover una negociación, que se
inicia, como era previsible, con una primera propuesta empresarial de sistema
de 4 equipos, para facilitar una corredera de unos 70 días de flexibilidad en
su apertura, y más capacidad de reacción ante posibles variaciones durante el
año. Esta propuesta era muy poco original y muy cómoda de gestionar, conocida
por estar muy extendida en la mayoría de empresas industriales para afrontar la
gestión de la organización de la producción en los valles y los picos de la
demanda, flexibilizando la jornada o el empleo.
La
representación sindical la rechazó por las posibles consecuencias negativas en
el empleo, que finalmente soportaba toda la propuesta y sobre el que gravitaba
la flexibilidad de la crisis.
CC.OO trabajó
con sus afiliados y éstos con el conjunto de los trabajadores en círculos de
discusión, reclamando aportaciones, ideas, sugerencias. Se inició la
negociación con la empresa y ésta acepto el reto, valorando la propuesta
sindical como un mayor esfuerzo para la mayoría de los trabajadores y
trabajadoras de Michelin al no descansar, como sin duda hubiera sido lo más
fácil, en los colectivos de trabajadores más jóvenes y en la contratación
temporal.
La organización
y la acción sindical, junto a la iniciativa y la participación, dan sus frutos
y en abril de 2013 se firma el Acuerdo que la empresa ha denominado “Acuerdo Nuevo Sistema Variable, Evolución de los Sistemas de Trabajo”, pero que los
sindicatos han decidido llamar “ACUERDO PARA EL REPARTO DEL TRABAJO Y EL
MANTENIMIENTO DEL EMPLEO”, que expresa mejor el contenido de que, en una
situación de crisis y tomando como punto de partida la flexibilidad de la
jornada, se logre el mantenimiento de TODO el empleo existente en MICHELIN.
Un Acuerdo que
mantiene los parámetros “tradicionales” de la producción, sin apenas repercusión
sobre los trabajadores, quienes sólo en el caso de una situación de extrema
falta de actividad, empezarían a dejar de ganar una parte de su salario a
la vez que reducen su jornada.
El Acuerdo ha
recibido el apoyo de la mayoría de los trabajadores y trabajadoras de Michelin
España, valorando que mejora la productividad y la competitividad de nuestras
plantas, porque al optimizar la rapidez de maniobra en la gestión de los
pedidos de fabricación, podría favorecer la asignación de más volúmenes de fabricación
y por ello de más empleo.
Los trabajadores
y trabajadoras de MICHELIN saben mejor que muchos gurús de la economía, que
para lograr estas ventajas competitivas, la mejor fuente es la acción sindical
y la negociación colectiva, y que desde el equilibrio en la interlocución entre
empresa y trabajadores, y no desde leyes que desmotivan el diálogo, se puede
alcanzar un Acuerdo como éste, cuyo resumen podría ser: "se trata de una
idea muy simple, aunque con desarrollo complejo: TRABAJAR MENOS PARA TRABAJAR
TODOS”.
Porque lo que es el acuerdo... no se explica:
ResponderEliminarhttp://www.michelin.ccoo.es/comunes/recursos/53308/doc153933_ACUERDO_SISTEMA_VARIABLE_.pdf
Porque el acuerdo, también hace falta verlo para valorarlo:
ResponderEliminarhttp://www.michelin.ccoo.es/comunes/recursos/53308/doc153933_ACUERDO_SISTEMA_VARIABLE_.pdf
El acuerdo no hay quien lo entienda
Eliminar"Sin apenas repercusión sobre los trabajadores"...QUE JETA. Será para los que lo han firmado, que como no van a trabajar no lo tienen que sufrir....
ResponderEliminar1.-411 trabajadores menos en 2014 con respecto a 2010.
ResponderEliminar2.-Hasta mas de cien horas extras realizadas mensualmente en un taller.
3.-1462 mill. de beneficios y nos firmais un convenio con congelacion salarial.
¿Por qué no acudis a las Asambleas de trabajadores a explicar lo que firmais?
ESTO SON DATOS Y NO PALABRERIA
1.-411 trabajadores menos wn 2014 con respecto al 2010.
ResponderEliminar2.-Mas de cien horas extras mensualmente en un taller
3.-1462 mill.de € de beneficios y nos firmais un convenio con congelacion salarial.
¿Por qué no vais a las Asambleas de trabajadores a explicar lo que firmais?
Eso que llamais "acuerdo" entre las partes no fue más que una nueva imposición de Michelin con el sello de vuestro "sindicato", que recoge lo peor de esa reforma laboral contra la que de forma tan cínica os habeis manifestado, y que firmasteis sin vergüenza alguna a espaldas de los trabajadores/as, de los que SÍ vamos a trabajar y sufrimos diariamente las consecuencias de la variabilidad y demás agresiones que habeis permitido año tras año contra nuestros derechos laborales y nuestra calidad de vida. Y todo, ¿a cambio de qué tipo de prebendas?. Los sindicalistas de verdad, los que tienen principios, los sienten y llevan a la práctica, jamás darían la espalda a los trabajadores/as como venís haciendo vosotros desde hace muchos años.
ResponderEliminarPor último, un consejo: como dijo José Martí, "si no luchais, tened al menos la decencia de respetar a quienes sí lo hacen".